Es evidente que la infancia es una etapa de la vida de suma importancia para la formación de la identidad humana en todos sus aspectos (afectivo, escolar, social, cognitivo...).

   Las niñas y niños no expresan sus sentimientos y emociones de la misma forma que lo hacemos las personas adultas.

   En ocasiones, sus rabietas, enfados, lloros, conductas disruptivas, bajo rendimiento escolar, no son más que su forma de trasladarnos su malestar, frustración o su dificultad para afrontar determinadas situaciones.

    Si tu hijo/a muestra...

- Trastornos emocionales infantiles

- Trastornos de conducta (rabietas, miedo, agresividad, conflictos escolares...)

- Dificultades del aprendizaje

- Trastorno por déficit de atención con/sin hiperactividad

- Falta de habilidades sociales

-Retrasos del desarrollo

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